Pocas
obras en la historia de la música
occidental han influido tan poderosamente a las generaciones de compositores
que les sucedieron como Tristán und Isolde.
El
sistema del leitmotiv se subordina felizmente al flujo de la inspiración, a la
inquebrantada intensidad de la emoción que oculta y trasciende con eficacia la mera técnica.
En
la armonía de sus última obras, sobre todo en Tristán y en el preludio del
tercer acto de Parsifal, Wagner experimentó una evolución de su estilo personal que se vio estimulada
por su conocimiento del lenguaje cromático de los poemas sinfónicos de Lizst.
La
obra de Wagner afectó a todo el genero operístico subsiguiente. Su peculiar
visión de la mitología y el simbolismo no pudo ser imitado, pero su ideal de la
ópera como drama de contenido significativo ejerció una profunda influencia.
hahaha... buen trabajo jorge... después le doy una leída
ResponderEliminarExcelente blog Jorge, no me podía esperar algo menos culto de tí xD
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